Nuestro principal target de clientes son los teatros, pero de vez en cuando hay locales de ocio y de restauración peculiares que nos piden cortinas acústicas para separar ambientes o crear zonas más intimas y acogedoras en sus locales.
Este es el caso del restaurante Piegallo en Dos Hermanas (Sevilla), que convierte la cocina de vanguardia en un festival de sabores que no se espera, pero cuando se degusta realmente es una exquisitez que no solo envuelve por su sabor, también la decoración y el buen trato resumen años de experiencia que han ido recogiendo lo mejor de las culturas americana, europea y asiática, de la mano de su creador y artífice Fran Jiménez.
Un restaurante con tanta variedad cromática en sus platos no podía faltarle unas cortinas que hablasen por sí mismas y que al mismo tiempo sumerja al comensal en el sonido del buen yantar. Porque cuando vamos a comer con unos amigos siempre deseamos pasar un rato agradable donde poder conversar, sin ruidos molestos pudiendo disfrutar de un buen almuerzo o cena.
Para lograr un ambiente agradable una cortina acústica que separe un espacio grande abierto o diáfano, utilizar tejidos técnicos adecuados nos puede proporcionar elegancia, privacidad y tranquilidad, éste último concepto muy apreciado en muchos restaurantes, pero que en muy pocos pueden conseguir por el diseño interior.
Una cortina acústica Insoudtex resuelve estos problemas, aporta colorido gracias a sus intensos colores, transforma el espacio de manera inteligente gracias a la versatilidad de sus rieles y accesorios que se adaptan a cualquier proyecto por complejo que sea éste. Por otro lado su textil procede de origen con el tratamiento más revolucionario en materia contraincendios, otorgándole la calificación ignífuga Clase 1.
El paladar se educa como el oído, escuchando y observando a los clientes, comentando las historias de un plato que surgió recordando una brisa fresca en un lugar especial o un olor característico en una visita a un lugar turístico. Evocar una situación espacio-temporal a través del arte culinario es lo que este restaurante nos trae con la diversidad cultural.
Al restaurante Piegallo le sobraban argumentos para demostrar las excelencias de su cocina, bien queda constatado por los numerosos comentarios y reseñas que hemos encontrado en google, como «un gran descubrimiento», «platos insuperables», «comida muy rica», «servicial», etc… Al mismo tiempo y gracias a las cortinas acústicas que nos solicitaron han creado espacios más íntimos y acogedores, con un tejido en chenilla de color rojo de tacto aterciopelado que le da ese toque presidencial.
Otro plus a tener en cuenta es que con estas cortinas, el restaurante Piegallo gana en absorción acústica y sumerge a los comensales en un ambiente aislado y tranquilo, ayudando así a reducir la reverberación y reflexiones que terminan causando ecos indeseados. Este efecto en un restaurante que no esté acondicionado acústicamente es el llamado «efecto café», aquel que se origina cuando un grupo de personas eleva el tono de voz y haciendo que poco a poco el resto de personas lo tengan que subir para ser oídos.
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